El barómetro sanitario le otorga un 6,61, la máxima nota obtenida por el SES desde su creación


 El índice de satisfacción de los extremeños con el Servicio Extremeño de Salud (SES) es de un 6,61, el más alto de la serie histórica que comenzó en 2002, según los datos del Barómetro Sanitario 2017 que ha hecho público el Ministerio de Sanidad, Servicios Sociales e Igualdad.

Los usuarios del SES dan mucha importancia a su sistema sanitario público, el 65 por ciento opinan que el servicio sanitario en Extremadura funciona bien o bastante bien y solo el 3 por ciento piensan que funciona mal.

Los centros de Atención Primaria obtienen una valoración por encima de la media del Estado, tanto en la atención de médicos, pediatras y enfermeros. Casi el 90 por ciento dice haber tenido una atención por su médico de familia buena o muy buena.

También la atención hospitalaria recibe una valoración algo superior a la mayoría de servicios regionales. Más del 80 por ciento consideran que la atención fue buena o muy buena. Lo mismo hay que decir de la atención en las urgencias hospitalarias, donde la valoración también es superior a la media del país, medio punto (6,57 frente a 6,09).

En la atención de urgencias, el 85 por ciento de los encuestados contestan que la atención en urgencias fue buena o muy buena. La valoración de la atención en los ingresos en los hospitales extremeños se encuentra en la media del resto del país, el 89,8 de encuestados han respondido que la atención ha sido buena o muy buena.

LISTAS DE ESPERA

El tiempo transcurrido en recibir una cita en Atención Primaria es de 1 ó 2 días en el 70,8 por ciento de los encuestados y un 13 por ciento es citado al tercer día de solicitarla. También el 78,8 por ciento considera que los profesionales de la medicina de familia resuelven la mayoría de los problemas de salud del paciente.

El 50,8 por ciento de los extremeños consideran que las listas de espera siguen igual, mientras que un 9 por ciento cree que han mejorado, porcentaje que está entre los tres más altos del país, solo superado por Aragón (13,4) y Castilla-La Mancha (11,5).

Respecto al equipamiento y medios tecnológicos de los hospitales públicos extremeños, los encuestados le dan una nota de 7,48, siendo un 7,67 la media nacional.

El servicio de receta electrónica tiene una valoración positiva, situándose en una nota de 8,59, ligeramente por encima de la media del país (8,44).

La serie histórica de la sanidad en Extremadura, se inició en 2002 con un 5,68 de media de satisfacción ciudadana con el Servicio Extremeño de Salud (SES), un año después de haber recibido las trasferencias sanitarias.

En 2003 subió hasta un 5,90. A partir de ahí el grado de satisfacción con la sanidad extremeña obtuvo una nota media superior a 6 hasta alcanzar su máximo histórico en 2010 con 6,46.

En 2011 inició un retroceso gradual con 6,36, que siguió en 2012 con 6,29, en 2013 con 6,03, hasta los 5,99 de 2014.

En 2015 comenzó la recuperación con 6,24, que siguió en 2016 con una máxima histórica de 6,51, que ahora ha sido superada en el barómetro 2017 con el 6,61.

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