Juan Carlos Perdigón
Concejal PP Ayto de Mérida
Recientemente hemos visto el «postureo» del Alcalde de Mérida con deportistas de nuestra ciudad, fotos para allá y para acá, recepciones oficiales, promesas de ayudas en forma de subvenciones y todo a unos meses de las elecciones, porque hasta la fecha, el deporte y los deportistas emeritenses han estado solos, con sus objetivos, solos con la ayudad de sus familias y en todo caso de su club, solos en el peregrinaje a la Delegación de Deportes a reclamar las ayudas prometidas y sí, digo peregrinaje por que algunos, o casi todos, conocen el camino de sus casas a la Delegación de Deportes, para rezarles a Santa Administración para que ese día tuviesen el fruto de sus súplicas, ir y volver, ir y volver con las manos vacías una y otra vez.
Ahora, los que prometían antes de las elecciones el mantenimiento de los clubes municipales de competición, han decidido suplantarlos, eliminarlos, forzar a los padres a constituirse en club. Los que prometían antes de las elecciones hoteles y viajes a los deportistas destacados de esos clubes municipales extintos, hoteles y viajes, no para el día de la competición, sino para los días previos, como decía el que fue concejal de deportes con fecha de caducidad: «Si ganamos las elecciones … eso con nosotros no va a pasar, os vais a ir a la competición unos días antes para que estéis descansados» , y tanto que se van unos días antes, en coche, en autobús o como puedan los padres y madres de estos deportistas o como imponga el Club de Badajoz o Cáceres con los que están obligados a competir.
Prometían antes de las elecciones que ningún niño pagaría por hacer deporte, que las instalaciones municipales serían gratis, que quede claro que yo no comparto el «gratis total», pero es lo que prometieron ellos y seguro que muchos clubes, padres, madres y abuelos de deportistas de nuestra ciudad, lo creyeron y seguro que muchos lo votaron por eso, entre otros motivos. Pues ha día de hoy no sólo se sigue cobrando las instalaciones municipales para que los niños hagan deporte, sino que además cobran las pretemporadas y las actividades por adelantado. Que digo yo, que antes de hacer una promesa de ese calado se deberían de haber informado si lo que prometían se podría hacer, yo creo, por el comportamiento de estos jovencitos, que lo sabían sobradamente… ¿pero que cabe esperar de la nueva política, los nuevos políticos?, pues lo habitual en ese histórico partido: «Tú promete… que luego ya veremos»
Y como decía, nos encontramos «ahora» al Alcalde y al primero que pase por la puerta de alcaldía, fotografiándose con deportistas, prometiéndoles subvenciones, ¡¡vaya!! … «el oro y el moro», sin tener en cuenta la trayectoria del deportista, sin decir de que importe hablan, sin buscar la equidad y el reconocimiento justo por los éxitos, esfuerzos, años de dedicación, calado de la competición, sin concretar nada, más allá de: «Te voy a dar una subvención, la que yo creo oportuna, eso sí… no nos critiques en prensa ni en redes sociales porque… «donde dije digo…digo Diego»
Es decir, que tiene el Sr. Alcalde desde Agosto de 2017, en un cajón, una proposición del Partido Popular de Mérida para crear una orden de subvenciones por CONCURRENCIA COMPETITIVA para entidades sin ánimo de lucro y deportistas de alto rendimiento. Que el Partido Popular ha denunciado en infinidad de ocasiones que esa propuesta no la lleva el Equipo de Gobierno al Pleno porque no les da la gana, que además la propuesta del Partido Popular se basaba en subvenciones donde estaban clarificados y cuantificados todos y cada uno de los aspectos y criterios de valoración, para que no existiese «ni trampa ni cartón», para que todos se pudiesen presentar en igualdad de condiciones y en la libertad de decir o criticar lo que estimase oportuno y que no sería ningún condicionante y ahora… el Alcalde hace una copia mala de la propuesta del Partido Popular y totalmente coercitiva.
Yo, de verdad, entono el «mea culpa» porque como humano que soy, he podido confundirme, aunque siempre he intentado ayudar en todo lo que podía y estaba en mi mano, pero de ahí a que me comparen con lo que hay hoy en este Ayuntamiento, diciendo que soy el peor concejal de deportes de la historia de Mérida, pues sinceramente, lo dudo. Pero…. ¿qué sabré yo?, si perdimos las elecciones de 2015, quizá fuese por eso, pero como el tiempo quita y da la razón, yo seguiré esperando a ver quien se confunde, a lo mejor, nos llevamos todos una sorpresa !!!
