Asociación Amigos de Mérida


La línea discontinua de la carretera nos permite adelantar sorteando obstáculos. Nos marcan la posibilidad de zigzaguear, cambiar de carril cada vez que nos convenga, evitando así tener que frenar nuestro avance. Se consigue así un doble propósito: dejar atrás el lugar del que hemos partido y acercarnos sin retraso a nuestro destino.

No hay ningún reparo al avance hacia un objetivo establecido. Ocurre, sin embargo, que correr esquivando los estorbos o impedimentos que nos encontremos en el camino, puede tener tanto de fuga como de necesidad de prosperar.

Muchos son los proyectos planteados en la ciudad de Mérida que “avanzan”, pasando de un carril a otro, permaneciendo siempre en el mismo sitio.

En un lejano 2002 se publicaba la inversión del Ministerio de Cultura de diez millones de euros en los Museos Visigodo y Nacional de Arte Romano. Desde entonces, periódicamente pueden encontrarse en los titulares de prensa noticias relativas a los motivos por los que la inversión planificada no se ha llevado a cabo o las dificultades encontradas en los proyectos presentados, intercaladas de aquellas otras en las que afirma categóricamente que en un breve plazo las obras estarán concluidas.

Similar suerte ha tenido el solar dejado por la demolición del cuartel Hernán Cortés. Un solar que ha aspirado a convertirse en un vértice de la ruta turística en la ciudad o en el centro de ocio y negocio del centro histórico. La realidad, es que, de nuevo, las noticias sobre su puesta en valor se alternan con silencios clamorosos y nuevas sobre las dificultades surgidas en las propuestas realizadas para su uso.

Sería ingenuo pensar que llevar a cabo uno cualquiera de los proyectos mencionados es tarea sencilla. Obviamente, es normal que aparezcan dificultades que supongan retrasos. Obviamente, no siempre es sencillo armonizar presupuesto con voluntad. Sin embargo, en la ciudadanía surge la duda de si no se está cambiando de un carril a otro, según convenga, para avanzar hacia… ¿Dónde? O para dejar atrás… ¿Qué?

El resultado es, en todo caso, siempre similar. El MNAR continúa esperando su ampliación; no hay ni una piedra puesta de la tantas veces prometida nueva sede del Museo Visigodo; los pastos que crecen en el solar del Hernán Cortés se alimentan de promesas incumplidas; los estudiantes universitarios continúan esperando una residencia pública; hay que desplazarse a la capital de la provincia para realizar las gestiones en la DGT y tantos otros casos.

Continuemos avanzando, dejando atrás tantas propuestas podamos.

About Mérida Digital

Toda la información relacionada con Mérida y su Comarca

View all posts by Mérida Digital

Deja una respuesta

Este sitio usa Akismet para reducir el spam. Aprende cómo se procesan los datos de tus comentarios.